El presidente ruso, Vladimir Putin, sostuvo conversaciones telefónicas con el presidente francés, Emmanuel Macron, y la canciller alemana, Angela Merkel,
«Se prestó especial atención a los problemas de resolver la crisis siria en el contexto de una situación que se intensifica rápidamente en Idlib como resultado de las acciones agresivas de las unidades extremistas contra las fuerzas del gobierno sirio y los civiles. Se subrayó la importancia de prevenir las consecuencias humanitarias para los civiles». Dijo el Kremlin.
«Vladimir Putin enfatizó la importancia de tomar medidas efectivas para neutralizar una amenaza terrorista mientras observa los principios de soberanía e integridad territorial de la República Árabe Siria», agregó el Kremlin.
Macron y Merkel expresaron «disposición para facilitar la disminución de las tensiones en el noreste de Siria».
La situación en Idlib se intensificó a principios de febrero después de que las fuerzas rusas y turcas hicieron otro intento de introducir un régimen de alto el fuego. En respuesta, los terroristas solo intensificaron sus ataques. El 11 de febrero, la oposición siria con el apoyo de Turquía lanzó una ofensiva contra las fuerzas sirias en Saraqib y Neirab en la provincia de Idlib. El ejército sirio repelió los ataques.
El miércoles, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, dijo que Ankara está lista para usar toda su fuerza militar en caso de una operación en Idlib. Agregó que una operación militar en Idlib es «solo cuestión de tiempo».