Los principales diplomáticos y jefes de defensa rusos e italianos han celebrado su cuarta reunión «2 + 2» en Roma para intercambiar puntos de vista sobre la estabilidad estratégica y el control de armas, así como sobre la situación en Siria y Libia. La reunión, que tuvo lugar después de un paréntesis de casi siete años, confirmó que los ministerios de Relaciones Exteriores y de Defensa de Rusia e Italia están restableciendo el diálogo y los contactos, escribe Nezavisimaya Gazeta.
Las consultas permiten a las partes coordinar sus posturas sobre temas de interés mutuo y encontrar respuestas adecuadas a los desafíos y amenazas actuales. Siendo así, Moscú acoge con beneplácito la voluntad de Roma de discutir la iniciativa del presidente ruso Vladimir Putin de imponer una moratoria en el despliegue de misiles de rango intermedio y corto, subrayó el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergey Lavrov, después de las conversaciones.
«Es digno de mención que Italia, pisando los talones a Francia, está abordando el tema de la crisis de control de armas, a raíz del famoso discurso del presidente Emmanuel Macron. Eso parece reflejar la tendencia general en la Unión Europea, que busca jugar «un papel más prominente en la política global, especialmente a la luz de la política destructiva de control de armas aplicada por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump», dijo al periódico Nadezhda Arbatova, jefa del Departamento de Estudios Políticos Europeos del Instituto de Economía Mundial y Relaciones Internacionales.
Mantener la seguridad y la estabilidad en el Mediterráneo oriental y meridional es un tema de máxima prioridad para Italia debido a su proximidad geográfica a los focos de conflicto, continuó el experto. «Además, Rusia e Italia tienen importantes intereses económicos en Libia. Italia no ha sido capaz de conciliar a las partes beligerantes por sí sola. Intentó hacerlo el pasado enero, pero fue en vano. El fracaso de la reunión entre Fayez al- Sarraj y Khalifa Haftar en Roma dieron un duro golpe al prestigio de Italia. Rusia parece ser un socio importante para Roma desde el punto de vista de regresar al gran juego libio», enfatizó.