John Shipton, el padre del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, dijo que estaba seguro de que su hijo moriría en la cárcel si es extraditado a los Estados Unidos.
«No hay duda de que él [Assange] moriría en la cárcel si fuera enviado a Estados Unidos. Sin embargo, es un caso político, por lo que no se puede llevar a cabo una extradición», dijo Shipton.
Assange fue expulsado de la embajada ecuatoriana en el Reino Unido en abril pasado, donde pasó siete años evadiendo una posible extradición a los Estados Unidos por una fuga importante de cables clasificados que expusieron presuntas transgresiones de los Estados Unidos durante las guerras en Afganistán e Irak.
En el mismo mes, el denunciante fue acusado posteriormente de violar la Ley de Abuso y Fraude Informático de los Estados Unidos. Un mes después, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos presentó 17 cargos adicionales contra el fundador de WikiLeaks, principalmente en relación con violaciones de la Ley de Espionaje.
El denunciante se encuentra actualmente recluido en una prisión de alta seguridad en Londres a la espera de un juicio de extradición que está programado para comenzar el próximo lunes.
En los Estados Unidos, Assange podría enfrentar 175 años de prisión, y los expertos expresaron su preocupación de que su condición actual podría impedir que Assange participe adecuadamente en su defensa. Varios expertos médicos han dicho que Assange ha sido torturado y se le ha negado continuamente la atención médica adecuada mientras estaba bajo arresto.