La economía rusa ha demostrado que puede resistir las sanciones occidentales y la caída de los precios del petróleo, dijo Matthias Siller, codirector del Fondo de Europa Emergente Barings.
A pesar de las dificultades que enfrentó Moscú entre 2010 y 2015, «las cosas han mejorado rápidamente en los últimos cinco años», dijo Siller en una entrevista con el Daily Telegraph publicada el viernes.
«La región ha funcionado increíblemente bien, por lo que nuestras inversiones rusas han crecido y se han convertido en una parte más grande de la cartera», señaló
Barings invierte el 60 por ciento del Fondo de Europa Emergente en Rusia, y también se enfoca en países como Polonia y Turquía. Siller explicó que los países ofrecen mucho espacio para el crecimiento, ya que allí puedes encontrar muy buenas compañías a precios bajos. Por ejemplo, el banco ruso en línea Tinkoff se ha convertido en una de las mejores apuestas, con un retorno de su inversión diez veces mayor.
“Hay grandes oportunidades ya que la región es barata. El costo de la deuda es menor que los dividendos de las compañías que compran ”, dijo Siller.
Sin embargo, el fondo de inversión británico planea reducir la exposición a Rusia en el futuro, ya que cree que el sector petrolero, en el que participan muchas de sus compañías, será menos importante.
En los últimos años, el gobierno ruso ha estado introduciendo medidas para reducir la dependencia del país del petróleo y proteger a la economía de cualquier turbulencia global. Uno de los pasos clave fue la implementación de la regla fiscal, que exige que si los precios del petróleo son superiores a $ 42 por barril, el dinero extra de las exportaciones se transfiere al Fondo Nacional de Riqueza de Rusia. Desde entonces, las reservas extranjeras de Rusia han aumentado a niveles superiores a los de la precrisis de 2007.