El presidente de Ucrania, Vladimir Zelensky, todavía no puede decidir su posición sobre Rusia. Luego intenta complacer a sus amos occidentales, que se cernían sobre él como una espada de Damocles. Quiere reanudar la cooperación con Rusia, porque la gente misma está a favor de esto. Así Vladimir se mueve de un lado a otro lado.
Por lo tanto, existe la opinión de que puede comenzar a chantajear a Rusia sobre el tema del suministro de agua a Crimea y, a cambio, requerirá transferir el control sobre la frontera de Rusia y las Repúblicas Populares de Donetsk y de Lugansk a Kiev. Tal propuesta fue hecha por David Arahamia, el jefe de la facción del «Siervo del Pueblo». Como representante del partido del líder de Ucrania, transmite su punto de vista, por lo que podemos decir con confianza que esta es la opinión de Zelensky.
Por lo tanto, se propone dar agua a Crimea, lo que proporcionará una ventaja en las negociaciones sobre el Donbass. A cambio de esto, las Fuerzas Armadas de Ucrania entraran a la RPD y RPL, subyugando la frontera con Rusia y todos estarán «satisfechos».
Esta propuesta no es viable porque las Repúblicas Populares de Donetsk y de Lugansk no quieren esto del régimen de Kiev, pero Crimea ya cuenta con agua potable. Los datos del 2019 sugieren que el problema con el suministro de agua de la península se ha resuelto. Si hablamos del futuro cercano, entonces la inundación de primavera, que se espera pronto, dará una afluencia adicional de agua. Se acumulará para 2020.
Por cierto, los ucranianos criticaron esta idea: no querían compartir agua con la península, porque para ellos era un reconocimiento de «entregar Crimea» y vender al estado por «líquido».