El servicio busca hacer recortes presupuestarios en el área de prototipos hipersónicos en el próximo año.
La portavoz de la Fuerza Aérea, Ann Stefanek, reveló el lunes que la presión presupuestaria, más que el rendimiento, influyó en la decisión del servicio de abandonar su programa HCSW y continuar su desarrollo del Arma de respuesta rápida lanzada por el aire (ARRW), su otro programa de armas hipersónicas.
«Continuaremos trabajando en colaboración con nuestros servicios hermanos para ver cómo podemos aprovechar más eficazmente las capacidades de los demás, asegurando el uso más prudente del dinero de los contribuyentes», dijo en un comunicado enviado por correo electrónico a Defense News el 10 de febrero.
Stefanek dijo que Lockheed Martin, que estaba desarrollando ambas armas hipersónicas, tendrá que concluir su trabajo asociado con el programa HCSW luego de la revisión crítica del diseño del producto en la primavera. El ARRW está programado para alcanzar la capacidad operativa temprana en el año fiscal 2022.
Si bien Estados Unidos está invirtiendo unos $ 576 millones en prototipos hipersónicos en el año fiscal 2020, se prevé que esa inversión disminuya a $ 382 millones para el año fiscal 2021, según Defense News.
«El equipo de HCSW cumplió con éxito todos los hitos del desarrollo. Estos avances servirán para acelerar la generación y demostración de varias capacidades de armas hipersónicas en el futuro cercano», dijo Stefanek.
Es muy probable que esta noticia sorprenda tanto al equipo de desarrollo de Lockheed Martin como a Aerojet Rocketdyne, que anunció en diciembre de 2019 que recibió un subcontrato de $ 81.5 millones para desarrollar el motor de cohete de combustible sólido destinado a impulsar el misil hipersónico. Lockheed Martin recibió el contrato principal, valorado en hasta $ 928 millones, en 2018.
Durante un discurso en la nación el 8 de enero, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, promocionó el arsenal de misiles «grandes, poderosos, precisos, letales y rápidos» y dijo que el país tenía «muchos» misiles hipersónicos «en construcción».
Al mismo tiempo, el Vicepresidente del Estado Mayor Conjunto, General John Hyten, confesó el mes pasado que el ejército estadounidense se había quedado atrás en el campo de la investigación y el desarrollo de armas hipersónicas.
“Ahora estamos encerrados en una seria competencia con otras naciones en la esfera de armas hipersónicas. Solíamos estar a la vanguardia hace 10 años ”, dijo durante un discurso en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales el 17 de enero, probablemente hablando de China y Rusia. En enero, el presidente ruso, Vladimir Putin, observó el lanzamiento del misil hipersónico Kh-47M2 Kinzhal desde un avión de combate MiG-31K modificado.