Los extremistas capturados por las fuerzas sirias en las cercanías de Alepo informaron que Turquía ayudó a los terroristas con finanzas y efectivos.
Los extremistas informaron que la parte turca apoyó a la organización terrorista Jebhat al-Nusra 1 (prohibida en Rusia), financiando sus actividades y reclutando a la fuerza a nuevos miembros.
«Fuimos detenidos por los policías turcos y nos dijeron que si no trabajamos para ellos y luchamos del lado de Jebhat al-Nusra (prohibido en la Federación Rusa), entonces matarán o arrestarán a mis familiares. Me dieron un salario de $100”, dijo Mahmoud al-Najim, natural de la aldea de Tibni.
Según él, el suministro del grupo terrorista se realiza desde Turquía y Arabia Saudita.
Otro de los interrogados dijo que fue capturado cuando su grupo se retiró al puesto de observación turco. Los terroristas querían esconderse detrás de los observadores turcos del fuego del ejército sirio.
“La familia no tenía suficiente dinero para la comida, y este destacamento reclutó hombres y les dio dinero. Me inscribí. Luego luché en diferentes grupos que formaban parte del Jebhat al-Nusra (prohibido en la Federación de Rusia)», dijo.
El terrorista señaló que extremistas de Pakistán y Afganistán también lucharon en su grupo.
Siria acusó previamente a Turquía de violar el acuerdo de Astana sobre Idlib y las acciones «colonialistas» en suelo sirio. Según el Gobierno de la República Árabe Siria, Ankara está tratando de ocupar parte del territorio de Siria e intervenir en los asuntos internos del país.