El martes, el Tribunal Popular Intermedio de Tianjin en el norte de China condenó al ex jefe de la Interpol y al ex viceministro de Seguridad Pública de China, Meng Hongwei, a 13 años y seis meses de prisión, informó la Televisión Central de China.
Según la cadena de televisión, el acusado no expresó su deseo de apelar el veredicto y no presentó un recurso contra la decisión. También tendrá que pagar una multa de dos millones de yuanes (alrededor de $ 292,000 al tipo de cambio actual).
Meng Hongwei está acusado de corrupción y abuso de cargos. Según los investigadores, mientras estuvo en el cargo, se embolsó sobornos por valor de 14,46 millones de yuanes ($ 2,1 millones).
El 7 de octubre del 2018, las autoridades chinas anunciaron que Meng Hongwei había sido detenido bajo sospecha de violar la ley. El Ministerio de Seguridad Pública de China dijo que el ex jefe de Interpol era sospechoso de corrupción y otros delitos.
En marzo del 2019, el liderazgo chino lo expulsó del Partido Comunista y lo destituyó de todos los cargos gubernamentales. El 24 de abril, la Fiscalía Suprema del Pueblo de China decidió detenerlo.
La batalla de China contra la corrupción comenzó a tomar fuerza después de que la «quinta generación» de líderes encabezados por Xi Jinping llegó al poder en el 2012. Tanto funcionarios ordinarios como funcionarios públicos de alto rango han sido despojados de sus cargos y condenados a penas de prisión en los últimos años como parte de la campaña anticorrupción a gran escala.