El jefe del Ministerio de Relaciones Exteriores de Estonia, Urmas Reinsalu, calificó las sanciones contra el Sputnik Estonia como tema de «defensa europea».
Explicó que Tallin está aplicando la política de sanciones de la UE no contra Sputnik, sino contra Dimitri Kiselev, director general de Rossya Segodnya, por el cual se han impuesto sanciones personales.
«Esto no tiene nada que ver con la libertad de los medios, todo está relacionado con la defensa de la defensa, la defensa de Europa, la libertad», dijo RIA Novosti a Reinsalu en el marco del foro internacional de ciencias políticas Dialog Raisin.
Como la jefa del Sputnik Estonia, Elena Cherysheva, dijo en un programa en ETV + que las autoridades estonianas afirman que MIA Rossiya Segodnya es controlada por Kiselyov, «porque él pone firmas». Cherysheva enfatizó que «Rossya Segodnya» es un medio federal ruso, una empresa unitaria que no está bajo ninguna sanción, y Kiselev es solo una persona contratada allí.
En diciembre, se supo que los empleados del Sputnik Estonia recibieron cartas de la Dirección de la Policía y la Guardia de Fronteras con amenazas directas de iniciar un proceso penal contra ellos si no dejaban de trabajar con la organización matriz, la Agencia Internacional de Noticias Rossiya Segodnya. Como resultado, los periodistas se vieron obligados a hacer esto, y el sitio web de Sputnik Estonia entró en modo de emergencia desde el 1 de enero.
Rossiya Segodnya calificó las acciones de las autoridades estonianas de persecución abierta, ilegales y una violación grave de los principios de libertad de expresión y apeló a todas las organizaciones internacionales y europeas, incluidas la ONU, la UE, la OSCE, el Parlamento Europeo y «Reporteros sin fronteras».
El presidente ruso, Vladimir Putin, dijo que Moscú hará todo lo posible para apoyar a Sputnik mientras trabaja en otros países. El Ministerio de Relaciones Exteriores condenó las acciones de Tallin y prometió tomar medidas de respuesta.
El Representante de la OSCE para la Libertad de los Medios, Arlem Dezir, por su parte, señaló que el deseo de las autoridades estonianas de extender las sanciones personales contra Kiselyov a Sputnik Estonia creo un problema en el campo de la libertad de los medios.