Brasil ignora la petición de México y cancela su participación en todas las instancias de la Celac, debido, según medios, a la presencia de Cuba y Venezuela.
“Brasil decidió suspender su participación en las distintas instancias de la Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños), tanto las de carácter político como las de naturaleza técnica”, informó el miércoles la Cancillería brasileña en un comunicado.
El salirse de la Celac incluye la suspensión de los diálogos que el organismo mantenga con socios de fuera de la región, añade el texto.
Bolsonaro hará “frente” a los gobiernos de Venezuela y Cuba
Según medios brasileños, la retirada de Brasil respondería a la presencia de Venezuela y Cuba en el organismo regional, aunque oficialmente han explicado que, debido “al actual contexto de crisis regional”, la Celac “no cuenta con todas las condiciones para actuar”.
La semana pasada se realizó la cumbre Celac 2020, en donde México asumió la presidencia pro tempore del ente. Únicamente cuatro naciones no enviaron representantes a la capital mexicana: República Dominicana, Trinidad y Tobago, Bolivia y Brasil. México informó que se ha puesto en contacto con Brasil para que se replantee su postura.
De acuerdo con varios medios, la Cancillería brasileña declaró haber avisado anticipadamente al Gobierno mexicano que no participaría en los eventos correspondientes a la instalación de la presidencia pro tempore de la Celac.
No se trata de la primera vez que el Gobierno de extrema derecha de Jair Bolsonaro decide abandonar organismos regionales, pues en abril de 2019, alegando que se trataba de una creación del fallecido presidente de Venezuela Hugo Chávez Frías para ejercer el poder de la izquierda en la región, Brasil anunció que dejaba la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur).
Bolsonaro ha prometido en reiteradas ocasiones cortar los lazos con Cuba y ha tachado al Gobierno de Venezuela, presidido por Nicolás Maduro, de “dictatorial”. El presidente brasileño, desde su campaña electoral y luego ya en el Palacio de Planalto, se ha caracterizado por sus posturas cercanas al presidente estadounidense, Donald Trump, quien ha arreciado su cruzada contra el Gobierno de Maduro.