Tras el ataque aéreo estadounidense en Irak que mató al máximo general iraní Soleimani y a dos líderes de la Fuerza de Movilización Popular Iraquí, una medida que no fue autorizada por el gobierno del país, el parlamento de Irak adoptó una moción para expulsar a todas las fuerzas militares extranjeras presentes en el país, incluyendo Tropas estadounidenses
El Departamento de Estado de EE. UU. Ha anunciado que cualquier nueva delegación estadounidense enviada a Irak debatiría los asuntos de volver a una asociación estratégica en lugar de retirar las tropas con el gobierno del país.
«Sin embargo, es necesario que haya una conversación entre los gobiernos de EE. UU. E Iraq no solo con respecto a la seguridad, sino también con respecto a nuestra asociación financiera, económica y diplomática», dijo el Departamento de Estado.
El comunicado de prensa señaló además que Washington busca ser «un amigo y socio de un Iraq soberano, próspero y estable», al tiempo que afirma que la presencia militar de Estados Unidos en el país persistirá para luchar contra Daesh * y proteger a los estadounidenses, iraquíes, y socios de coalición liderados por Estados Unidos.
El Departamento de Estado también anunció que discutirá la participación de la OTAN en Irak con la delegación de la alianza durante una reunión que tendrá lugar más tarde el 10 de enero. Señaló que la discusión se lleva a cabo en línea con el llamado anterior del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, a que la OTAN se involucre más en los asuntos de Medio Oriente.
Irak intenta expulsar a las tropas estadounidenses
El Parlamento iraquí votó durante una sesión extraordinaria el 5 de enero para expulsar la presencia militar extranjera del país, incluidas las tropas estadounidenses que invitó en 2014 para combatir la incursión de Daesh *.
«El gobierno iraquí debe trabajar para poner fin a la presencia de tropas extranjeras en suelo iraquí y prohibirles usar su tierra, espacio aéreo o agua por cualquier motivo», se lee en la resolución del parlamento.
La decisión del parlamento se produjo como respuesta a los ataques aéreos de Estados Unidos en territorio iraquí sin discutir o al menos notificar a Bagdad sobre ellos. El último ataque de este tipo, que desencadenó la votación, mató al máximo general iraní Qasem Soleimani y a dos miembros prominentes de las Fuerzas de Movilización Popular de Iraq.
Estados Unidos, sin embargo, no ha anunciado oficialmente ninguna intención de retirar sus fuerzas del país. Sin embargo, después de la votación, comenzó a circular una carta en los medios, en la que Washington informó a Bagdad sobre los preparativos para un próximo retiro. Mark Milley, presidente del Estado Mayor Conjunto, luego aclaró que la carta fue enviada por «error» y que no refleja la realidad, a pesar de ser «genuina».