La semana pasada, el Ministerio de Relaciones Exteriores de México acusó a Bolivia de «acoso e intimidación» a sus diplomáticos en la embajada de México en La Paz y solicitó una reunión con el encargado de negocios de Bolivia.
La boliviana Jeanine Anez dijo el lunes que se había tomado la decisión de expulsar del país a un embajador mexicano y a dos diplomáticos españoles.
El gobierno les dio a la embajadora María Teresa Mercado, así como a los diplomáticos Cristina Borreguero y Álvaro Fernández, 72 horas para partir.
Los acontecimientos se produjeron luego de que Reuters informara el miércoles que el Ministerio de Relaciones Exteriores de México acusó a Bolivia de «hostigamiento e intimidación» a sus diplomáticos en la embajada mexicana en La Paz, solicitando una reunión con el encargado de negocios de Bolivia.
El ministerio considera que la vigilancia abundante de su embajada, así como el aumento de la presencia policial en todo el edificio, equivalen a una invasión de la embajada y van en contra del artículo 22 de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas.
Tensiones entre Bolivia y México
Las tensiones entre las naciones de los dos países aumentaron después de que el presidente boliviano Evo Morales tuvo que renunciar bajo la presión del público y el ejército en noviembre.
La segunda vicepresidenta del Senado, Jeanine Anez, se declaró presidenta interina en una sesión extraordinaria en el Parlamento que fue boicoteada por el partido socialista de Morales. Él mismo ha caracterizado la situación como un golpe de estado.
Morales buscó asilo político en una embajada mexicana en La Paz, y la mayoría de los altos funcionarios del gobierno de Bolivia también renunciaron y solicitaron asilo en la embajada.