«Camacho confirma que cívicos hablaron con militares y policías para derrocar a mi gobierno. Fue un golpe de Estado pese a que Áñez, Mesa y el propio Camacho intentan negarlo. La justicia debe actuar contra los golpistas y genocidas», denunció Morales.
El expresidente de Bolivia, Evo Morales exigió justicia contra dirigentes del gobierno de facto, puntualmente del exlíder cívico, Luis Camacho, quien reconoce mediación de su padre con militares y policías para perpetrar el golpe de Estado
«Camacho confirma que cívicos hablaron con militares y policías para derrocar a mi gobierno. Fue un golpe de Estado pese a que Áñez, Mesa y el propio Camacho intentan negarlo, el vídeo es una prueba irrefutable. La justicia debe actuar contra los golpistas y genocidas», denunció Morales.
El audiovisual ilustra a Camacho en una reunión con un grupo de personas, donde narra las horas previas al golpe de Estado consumado contra Morales; en su intervención el exlíder cívico indicó que se consolidó un acuerdo con militares y policías para que no salieran a las calles para controlar los focos violentos.
Fue mi padre, quien cerró con los militares, para que no salgan; por esa razón, la persona que fue a hablar con ellos y a coordinar todo fue Fernando López, actual Ministro de Defensa. Por eso él está de ministro, para cumplirle los compromisos”, aseguró Luis Fernando Camacho.
El golpista Camacho, afirmó que el acuerdo tenía el objetivo de evitar la represión militar, sin embargo, luego de la renuncia del presidente Constitucional, se contabilizan alrededor de 35 muertos bajo el gobierno golpista.
Asimismo, Morales reiteró que el gobierno de facto cuenta con el respaldo de los Estados Unidos (EE.UU.), la complicidad es tan evidente en el golpe de Estado en Bolivia que la embajada norteamericana en Argentina habla por los golpistas y pide al gobierno del presidente Alberto Fernández limite mi refugio político, como en tiempos del Plan Cóndor», agregó.