El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dedicó su última conferencia matutina del año a detallar el avance en la lucha contra la corrupción a través de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF).
A esos efectos Santiago Nieto Castillo, titular de la UIF, rindió un exhaustivo informe en el que planteó cinco ejes principales del trabajo en los que incluyó el robo de combustibles, tráfico de migrantes, defraudación fiscal, el narcotráfico, y el lavado de dinero.
El funcionario explicó que la batalla contra la corrupción por parte de la UIF dentro del Ministerio Público se centra en la investigación y definición de las estructuras financieras de los grupos delincuenciales, y el apoyo social que puedan tener.
La política aplicada es la del bloqueo financiero y decomiso de los recursos de todo tipo obtenidos de forma ilícita bajo el concepto de cero tolerancia a la corrupción y a la impunidad política.
Se ejecutan los trabajos de las 170 denuncias procesadas en esos cinco ejes, con visitas de autoridades administrativas y otras medidas respecto a las 360 personas, incluidos 63 servidores públicos, con responsabilidad penal en el tema de lavado de dinero.
Reveló que se han bloqueado mil 368 millones de pesos (76 millones de dólares), en miles de cuentas bancarias, y en este mes se recuperaron cinco mil 23 millones de pesos (casi 280 millones de dólares) y 52 millones de dólares que antes eran usados por delincuentes del crimen y de cuello blanco.
Dijo que a esos bienes malversados se les ha dado un uso social mediante el Instituto para devolver al pueblo lo robado que incluye bienes de gran valor como residencias, fincas, joyas y autos de alta gama, las cuales han sido subastadas públicamente.
Refirió que han sido eliminadas empresas fantasmas y se han recuperado las fortunas acumuladas por esa práctica delictiva.
Se refirió también a la trata de personas, el robo de hidrocarburos, la corrupción en las empresas de transporte público, líderes de cárteles del narcotráfico ya aprehendidos y lavado de dinero procedente del robo de gasolina.
Explicó que la UIF le siguió la ruta al dinero mal habido y por esa vía se logró llegar hasta los delincuentes.
También habló del caso de Genaro García Luna, el secretario de Seguridad Pública del expresidente Felipe Calderón (2006-2012), sus empresas desde 2011 en Panamá para encubrir los millones de dólares robados en México y llevar una vida de gran lujo en Estados Unidos donde es juzgado en estos momentos.
Explicó que la empresa en Panamá está relacionada con Estados Unidos, y desde ella triangulaba los recursos malversados en contra de la Hacienda mexicana, con transferencias internacionales de pagos y colocación de recursos en Estados Unidos y Panamá.