Policías militares rusos han asegurado una aldea cerca de Raqqa, anteriormente ocupada por tropas estadounidenses, mientras Moscú continúa patrullando áreas estratégicas a lo largo de la frontera turco-siria.
Los militares llegaron a Tal Samin, a unos 25 kilómetros al norte de Raqqa, la antigua capital del Estado Islámico (IS, anteriormente ISIS), a principios de esta semana.
El video, publicado por el canal de televisión Zvezda, muestra APC y jeeps blindados con banderas rusas entrando a la aldea, con docenas de tropas armadas asegurando el área.
Tal Samin se encuentra cerca de una intersección de carretera estratégica que conecta Raqqa con las partes central y norte del país. Estados Unidos solía mantener un puesto avanzado allí, hasta que los soldados estadounidenses abandonaron rápidamente el área en octubre.
Rusia y Turquía acordaron anteriormente que Moscú facilite la retirada de las fuerzas kurdas de la «zona segura» de 30 km (18,5 millas) a lo largo de la frontera sirio-turca. Las naciones ahora realizan patrullas conjuntas dentro del área designada.
Los policías han asegurado previamente varias bases estadounidenses, incluido un campo de aviación en Kobani, que fueron abandonadas después de que el presidente estadounidense Donald Trump anunciara la retirada de las fuerzas estadounidenses de Siria.