Una base militar estadounidense en el campo petrolero al-Omar en la provincia de Deir Ez-Zor, en el sureste de Siria, fue atacada por asaltantes desconocidos el viernes, informó la emisora Al-Ikhbariya.
El ataque coincidió con la llegada de camiones con equipo militar a la base, según la emisora. Según los informes, los soldados estadounidenses respondieron con bombardeos y granadas de aturdimiento.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Mark Esper, dijo a principios de semana que las tropas estadounidenses en el noreste de Siria habían terminado de maniobrar según fuera necesario y que el número total de tropas en el terreno se mantendría en alrededor de 600.
El movimiento de las fuerzas estadounidenses ha causado mucha incertidumbre en Siria desde que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, anunció abruptamente un retiro de tropas a principios de octubre. Sin embargo, la retirada nunca se completó, y las tropas eventualmente establecieron un campamento en campos petroleros sirios controlados por kurdos aliados, alegando que Daesh * no tomó los recursos.
Trump, mientras estuvo en la Cumbre de la OTAN esta semana, atribuyó a las fuerzas estadounidenses la protección del petróleo para que no caiga en manos de terroristas.