Miles de manifestantes se reunieron en la Plaza de la Dignidad de Santiago por séptimo viernes consecutivo desde el comienzo de las protestas antigubernamentales que han afectado a la nación desde octubre.
Los cañones de agua rociaron a las multitudes, quienes arrojaron piedras hacia atrás en la Plaza, que se conoce localmente como ‘Plaza de la Dignidad’.
Los manifestantes denunciaron las acciones de la policía chilena que, según ellos, han llevado a 232 manifestantes que sufren lesiones en los ojos, con imágenes que muestran a personas con parches en el ojo.
Las protestas fueron provocadas por un aumento ahora retirado de las tarifas del metro. El descontento social ha sido alimentado por la frustración con las políticas de Pinera y la creciente desigualdad.