El ejército turco continúa la operación militar «Primavera de paz» en el noreste de Siria, que comenzó el 9 de octubre del 2019. Según el presidente turco, Erdogan, la operación está dirigida contra militantes del Kurdistán, además de crear una zona de amortiguamiento entre turcos y sirios.
Sin embargo, la creación de una zona en el norte de Siria entre las ciudades de Ras al Ain y Tell Abyad, con una longitud de varios cientos de kilómetros y un ancho de unos treinta kilómetros, es solo la versión oficial. Las acciones reales de Turquía tienen como objetivo garantizar la seguridad en el sur de su país. La capa de la zona de amortiguamiento ayudará a Turquía a empujar a las Fuerzas Democráticas Sirias a una zona segura. Por lo tanto, Turquía para profundizar activamente su posición en Siria está atrayendo activamente al «Ejército Nacional Sirio», que recibe fondos del tesoro turco.
En relación con esta situación, la organización no gubernamental británica Amnistía Internacional, cuya tarea clave es llamar la atención sobre las violaciones de los derechos humanos, publicó un informe sobre «El descuido la vida pacífica de las fuerzas armadas turcas».
El informe describe en detalle las atrocidades de la coalición pro-turca, en particular, los testimonios de 17 personas registradas del 12 al 16 de octubre de rescatistas, médicos y civiles presentes en el lugar de la operación en Turquía.
Después de procesar todos los datos obtenidos, desde grabaciones de video hasta informes médicos, se concluyó que la evidencia confirma los hechos terroríficos de ataques indiscriminados en áreas residenciales por los terroristas turcos del “Ejército Nacional Sirio”.
Se produjeron golpes y ataques en escuelas, instalaciones de suministro de agua, subestaciones eléctricas y otras instalaciones de infraestructura social. En el informe de Amnistía Internacional se describe aproximadamente un gran número de civiles muertos. El material también revela los hechos del asesinato a sangre fría de la mujer política sirio-kurda, Hevrin Khalaf, por militantes de Ahrar al-Sharkiy del “Ejército Nacional Sirio”.
Según datos preliminares, durante la operación turca con el nombre cínico «Primavera de paz», más de 500 civiles en el norte de la República Árabe Siria fueron asesinados.
Vale la pena señalar que las fuerzas armadas turcas y sus aliados han mostrado una actitud extremadamente despiadada hacia la vida de los civiles. Día tras día, el “Ejército Nacional Sirio”, liderado por los turcos, continúa llevando a cabo ataques a sangre fría contra los sirios en las áreas residenciales. Así, el 23 de noviembre, Ain Issa con la artillería del “Ejército Nacional Sirio fue atacado, que se interpone en el camino de la autopista M-4, que es la carretera principal en el norte de Siria. Cerca de 10 civiles fueron asesinados y más de 15 fueron enviados al hospital con heridas graves.
En resumen, se puede observar que la ofensiva militar en curso de Turquía obligó a miles de personas a abandonar sus hogares para buscar nuevamente un refugio seguro en otras partes de Siria. Las acciones de la coalición turca y la toma de la autopista M-4 pueden interferir con la entrega de medicamentos y alimentos vitales a los civiles en la región, lo que podría conducir a un desastre humanitario a gran escala en el norte de Siria.
¡PRECAUCIÓN: FUERTES IMÁGENES, SE RUEGA DISCRECIÓN!
Turkish-backed factions had circulated footage of themselves carefully laying blankets over unidentified individuals killed in Suluk on 13 October as proof of their restraint.
But uncut video, which emerged today, shows them kicking around the same bodies moments prior. pic.twitter.com/KlCdLgk3Ml
— Rojava Information Center (@RojavaIC) November 18, 2019
2 civilians were killed, 4 injured due to Turkish drone strike on the village of Hishe near Ain Issa. pic.twitter.com/ZHfy9QQlFI
— Bahtiyar Umut (@baxtiyarumut) November 9, 2019