El embajador de Siria ante la ONU, Bashar al-Ja’afari, dice que Estados Unidos ha estado invadiendo los campos petroleros del país y saqueando sus recursos mientras la ONU permanece en silencio sobre el acto de robo de Washington.
«Estados Unidos ocupa pozos petroleros sirios y saquea los ingresos de los sirios a la sombra del silencio del Consejo de Seguridad de la ONU», dijo el sábado en una reunión del organismo de 15 miembros en Nueva York.
Ja’afari dijo que el terrorismo de estado de EE. UU. Ha atacado a Siria en un intento por cambiar el mapa geopolítico de la región. «La guerra siria terminará cuando termine el apoyo extranjero al terrorismo», agregó.
El embajador acusó además a Turquía de ocupar el territorio sirio, matar ciudadanos, desplazar a decenas de miles de personas y desplegar terroristas en el país árabe.
El mes pasado, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, anunció que las tropas estadounidenses permanecerían en Siria para «asegurar» las reservas de petróleo e incluso darían «una gran pelea» contra cualquier fuerza que intentara tomarlas.
También expresó interés en llegar a un acuerdo con ExxonMobil u otra compañía energética para aprovechar las reservas de petróleo sirias.
El jefe del Pentágono, Mark Esper, amenazó entonces con que las fuerzas estadounidenses desplegadas alrededor de los campos petroleros sirios usarían la «fuerza militar» contra cualquier parte que intente desafiar el control de esos sitios, incluso si fueran las fuerzas del gobierno sirio o sus aliados rusos.
Las tropas estadounidenses se trasladan de Irak a Siria
El sábado, la agencia oficial de noticias SANA informó que un convoy de fuerzas estadounidenses había ingresado a la provincia siria de Hasakah desde Irak.
El convoy que constaba de once vehículos, incluido un camión cisterna y un camión con equipo militar, había pasado el cruce fronterizo de al-Waleed en la frontera sirio-iraquí.
Legisladores alemanes de AfD visitan Siria
En otro desarrollo el viernes, miembros de la Alternativa para Alemania (AfD) de Alemania, que ha presionado durante mucho tiempo por la deportación de los migrantes sirios, visitaron el país devastado por la guerra.
Mantuvieron una reunión con representantes del gobierno del presidente Bashar al-Assad en Damasco para mostrar que Siria es un «país de origen seguro» para el retorno de los migrantes.
La reunión también se refirió a una posible asociación económica entre Alemania y Siria.
AfD dijo en un comunicado que su objetivo era «evaluar concretamente la situación en Siria en persona, así como tener un diálogo sobre la situación que rodea al pueblo sirio y el estado actual del proceso de paz».