El ex presidente de Bolivia, Evo Morales, quien renunció la semana pasada en medio de protestas y luego huyó a México, dijo que regresaría a Bolivia si la Asamblea Legislativa Plurinacional, el parlamento del país, no apoyaba su carta de renuncia.
«Mi carta de renuncia está en la asamblea. Si la asamblea no la adopta, volveré. Por el momento, siento que soy capaz de apaciguar a Bolivia», dijo Morales en una entrevista con El Universal el jueves.
Morales argumentó que la violencia armada, en curso en Bolivia, no podía traer la paz al país.
«El diálogo con la participación de las Naciones Unidas, la Iglesia Católica y los países mediadores traerá la paz a Bolivia», sostuvo el ex presidente.
Morales presentó la carta el domingo pasado y Jeanine Anez, vicepresidenta de la cámara alta del parlamento, asumió la presidencia interina y nombró un gabinete interino. El tribunal constitucional confirmó que la transición del poder al legislador de la oposición era legal. Aún así, los legisladores de la parte de Morales, MAS, insistieron en que su renuncia debería haber sido aceptada por el parlamento. A pesar de eso, los legisladores boicotearon las sesiones del parlamento dedicadas a su renuncia.
Morales decidió renunciar después de semanas de protestas que siguieron a las elecciones presidenciales del 20 de octubre. Las autoridades electorales dijeron que había asegurado su próximo mandato en la primera vuelta, mientras que la oposición insistió en que había irregularidades en el proceso de conteo de votos. Morales ha caracterizado la transición del poder a Anez como un golpe de estado