Acnur ha registrado, en los últimos años, 76.000 peticiones de refugio por parte de hondureños, sumadas a las 18.800 que tenían ese estatus en 2018.
La violencia en Honduras ha provocado que casi 250.000 personas se desplacen para huir del peligro y resguardar a sus familias, informó este martes el representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para Refugiados (Acnur) en ese país, Andrés Celis.
El funcionario explicó que esta situación se debe al control ejercido por pandillas en varias localidades de la nación, particularmente, en áreas urbanas como Tegucigalpa (capital), donde estos grupos realizan extorsión, tráfico de drogas y sicariato.
“Estamos hablando de 247.000 personas, familias completas que han huido entre 2004 y 2018 de sus hogares, sus comunidades, hacia otros poblados o ciudades”, precisó.
https://twitter.com/ACNURamericas/status/1194357812165513217
Por otro lado, indicó que en los últimos años han registrados 76.000 peticiones de refugio por parte de hondureños, sumadas a las 18.800 que tenían ese estatus en 2018.
«Tenemos una cifra de casi 95.000 personas entre refugiados y solicitantes de nacionalidad hondureña, principalmente en Estados Unidos y México», acotó.
Medios locales han reseñado que, en las zonas afectadas por la violencia de las pandillas, tanto la Policía como el Ejército solo ingresan en operaciones temporales o durante persecuciones, fuertemente armados.