En agosto de este año, las fuerzas del gobierno sirio cesaron unilateralmente el fuego, anunciando la creación de la zona de desescalada de Idlib. Sin embargo, la creación de esta zona no resolvió el problema de los conflictos dentro de las provincias de esta región explosiva. Un gran número de grupos se atrajo precisamente allí, y la mayoría de ellos juraron lealtad a la organización terrorista Jebhat al-Nusra. Fue aquí donde los estadounidenses supuestamente encontraron y destruyeron al líder del grupo terrorista ISIS.
Los detalles sobre la situación en la región ocupada habló una fuente militar.
Una serie de explosiones poderosas y una crisis
Una serie de explosiones nocturnas poderosas en los últimos días tronaron en las estaciones de servicio en la zona rural de Idlib.
En la ciudad de Sarmada, explotaron gasolineras y petroleros. En la región controlada por los islamistas, comienza una grave crisis de combustible, así como una crisis alimentaria, ya que las panaderías aquí operan desde generadores de gasolina. Esto podría provocar protestas entre la población de Idlib.
Los recursos de propaganda islamista se apresuraron a acusar a las fuerzas aeroespaciales rusas, luego a la aviación de la Coalición de Estados Unidos, que a veces bombardean a terroristas o mezquitas especialmente revoltosos con los feligreses. Se hizo evidente para todos que ningún avión tenía nada que ver con estas explosiones, lo que significa que los extremistas están volviendo a volar la infraestructura de otros extremistas.
Extremistas vs Extremistas
El grupo terrorista Hayat Tahrir al-Sham, mejor conocido por el nombre de la organización terrorista islámica internacional Jebhat al-Nusra (Frente de la Victoria), una vez más ha comenzado a reagrupar sus fuerzas en la zona de desescalada de Idlib. Las rotaciones dentro del grupo completo ocurren constantemente. Debido a la gran cantidad de los llamados subgrupos, la disputa ocurre regularmente entre los yihadistas. Algunos discuten sobre recursos, falta de armas, otros sobre alimentos y salarios.
Así, se supo que el 27 de octubre los extremistas del grupo Hayat Tahrir al-Sham, estacionados en la aldea de Khish (40 kilómetros al sur de Idlib), se negaron a ir a Mkayer y Muka apunta a la vanguardia para un reemplazo planificado debido a la falta de alimentos y la cantidad requerida municiones
Las negociaciones sobre asistencia alimentaria con el grupo Feylak al-Sham, ubicado en la vecina Kafer-Sejna, no han arrojado resultados. Los líderes del Hayat Tahrir al-Sham, después de recibir una negativa del grupo aliado, se vieron obligados a recurrir a la amenaza de la pena de muerte entre sus combatientes para reprimir el descontento y aún llevar a cabo la rotación en las líneas del frente.
Es muy probable que comience una nueva guerra entre los extremistas en la provincia de Idlib.