El gobierno japonés planea llevar las conversaciones con Rusia a un nuevo nivel con el objetivo de resolver el problema territorial y firmar un tratado de paz, dijo el viernes el primer ministro japonés, Shinzo Abe.
«Ahora se ha lanzado una actividad económica conjunta en las cuatro islas del norte [las islas Kuriles del Sur]. Por tercer año consecutivo, nuestros ciudadanos han tenido la oportunidad de visitar las tumbas de sus antepasados, yendo en avión. Los acuerdos bilaterales son consistentemente implementados», dijo Abe al pronunciar su discurso en la sesión de apertura del parlamento.
«Después de resolver el problema territorial, firmaremos un tratado de paz», enfatizó. «Basado en la Declaración Conjunta Soviético-Japonesa de 1956, avanzaremos las conversaciones a un nuevo nivel y abriremos enormes posibilidades en los lazos japonés-rusos», señaló Abe.
Moscú y Tokio han estado en conversaciones para firmar un tratado de paz desde mediados del siglo XX. El principal obstáculo para lograr este objetivo es la cuestión de la soberanía de las Islas Kuriles del Sur, llamadas los Territorios del Norte en Japón. Después del final de la Segunda Guerra Mundial, las Islas Kuriles se incorporaron a la Unión Soviética. Sin embargo, la soberanía de Iturup, Kunashir, las islas Shikotan y las islas Habomai ha sido cuestionada por Japón.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia ha subrayado en repetidas ocasiones que la soberanía de Rusia sobre estas islas, que está comprometida con el papel en documentos internacionales y no puede cuestionarse.
En noviembre de 2018, el presidente ruso, Vladimir Putin, y el primer ministro japonés, Shinzo Abe, sostuvieron una reunión en el marco de la cumbre de la ASEAN en Singapur y acordaron impulsar las negociaciones de paz basadas en la Declaración Conjunta de 1956. El documento decía que el estado de guerra entre los dos países terminó y se restablecieron los lazos diplomáticos y consulares. En la declaración soviética se expresa su disposición a entregar la isla Shikotan y un grupo de pequeñas islas llamadas Habomai a Japón con la condición de que Tokio tome el control de ellas una vez que se firme un tratado de paz. La declaración fue ratificada por los parlamentos de los dos países el 8 de diciembre de 1956.
Este mayo, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, destacó que el documento implicaba claramente que un tema de desconexión fronteriza solo podía considerarse después de la firma del tratado de paz.