El presidente ruso, Vladimir Putin, se reunirá el lunes con sus homólogos turco e iraní, Recep Tayyip Erdogan y Hassan Rouhani, en Ankara para discutir los problemas de la solución de la paz en Siria en el marco del proceso de paz de Astana.
Los líderes de Rusia, Turquía e Irán abordarán una serie de cuestiones relacionadas con el proceso de paz sirio, como la situación en el norte del país, especialmente en la provincia de Idlib, donde los extremistas aún controlan grandes extensiones de territorio a pesar de los recientes éxitos del ejército sirio.
Las partes de las conversaciones también debatirán las soluciones políticas a la crisis siria, en primer lugar la creación del Comité Constitucional, ordenado por la decisión del Congreso Nacional de Diálogo Sirio que se reunió en la ciudad rusa de Sochi en enero del 2018, y también la situación humanitaria en el país, incluida la ayuda a los refugiados que regresan y la restauración de la infraestructura básica.
Además de la discusión trilateral, Putin también mantendrá reuniones separadas con Erdogan y Rouhani, durante las cuales tiene la intención de discutir la cooperación de Moscú con Ankara y Teherán y otros temas importantes.
Se espera que Putin discuta con Rouhani el estado actual del Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA) ya que Teherán dejó de cumplir con algunos de sus compromisos en virtud del acuerdo nuclear el 8 de mayo, primer aniversario del retiro de Estados Unidos del acuerdo .
El líder ruso también negociará la cooperación de la industria de defensa con Erdogan, quien mostró un considerable interés en la tecnología militar de punta de Rusia durante su visita al salón de aviación y espacio espacial MAKS-2019.
La primera reunión entre los líderes de Rusia, Turquía e Irán sobre Siria tuvo lugar en Sochi en el 2017 y desde entonces ha estado ocurriendo regularmente. La próxima cumbre será la quinta.
Durante reuniones anteriores dentro del llamado marco de Astaná, Moscú, Ankara y Teherán pudieron acordar la creación de zonas de desescalada en Siria, la cooperación en la lucha contra los extremistas, la facilitación del diálogo y las soluciones políticas a la crisis siria, creando condiciones para la retorno seguro de los refugiados sirios, proporcionando ayuda humanitaria.