Los enfrentamientos entre los manifestantes y la policía continuaron hasta la noche en la capital, Santiago, el jueves.
La policía antidisturbios intentó interrumpir a que los manifestantes convergieran en el palacio de La Moneda, la residencia oficial del presidente, desde cuatro direcciones diferentes.
Se utilizaron gas lacrimógeno y cañones de agua, mientras que también se realizaron cerca de 100 arrestos.
A la manifestación ya se le había denegado la autorización oficial del gobierno local de la ciudad.
Alrededor de 60 organizaciones organizaron el Día de protesta nacional, incluida la confederación sindical-la CUT, para exigir un «derecho social», es decir, un mejor sistema de salud pública, educación gratuita y de calidad, reconocimiento del trabajo no remunerado y protección de la semana laboral de 40 horas.