El lunes, Irán advirtió a Israel de «graves consecuencias» sobre sus «acciones agresivas» en medio de ataques aéreos en Siria contra objetivos que el primer ministro Netanyahu denominó iraníes.
El primer ministro israelí emitió una advertencia el martes a los líderes de Hezbolá, Irán y Líbano, diciéndoles que «tengan cuidado con lo que dicen y vigilen sus acciones».
En particular, Netanyahu destacó al líder de Hezbollah, Sayyed Hassan Nasrallah, y lo instó a «calmarse» en medio de la advertencia de este último de una respuesta inminente al choque de dos vehículos aéreos no tripulados israelíes cerca del cuartel general de Hezbollah en los suburbios de Beirut.
«Escuché lo que dijo Nasrallah. Sugiero a Nasrallah que se calme. Él sabe bien que Israel sabe cómo defenderse y pagar a sus enemigos», dijo Netanyahu en un discurso.
El domingo, dos drones israelíes se estrellaron cerca de la sede de Hezbollah, causando daños significativos al edificio del servicio de prensa e hiriendo a tres personas.
Líbano denunció el incidente como un «ataque» israelí contra la soberanía del país.