Con resultados notables en el mantenimiento de la estabilidad social, los centros de educación y formación profesional en Xinjiang de China han demostrado su eficacia en la lucha contra el terrorismo y el extremismo, y merecen reconocimiento y apoyo internacional.
Un libro blanco sobre la educación y capacitación vocacional de Xinjiang, publicado el viernes por la Oficina de Información del Consejo de Estado de China, habla sobre los diferentes aspectos de los programas, respondiendo a las llamadas preocupaciones planteadas por algunos países, organizaciones y figuras.
Durante algún tiempo, Xinjiang, un campo de batalla clave en la lucha contra el terrorismo en China, ha estado plagado de terrorismo y extremismo religioso, victimizando a civiles inocentes y a la policía.
Es absolutamente justo y legal que Xinjiang lleve a cabo los esfuerzos antiterroristas y de desradicalización para garantizar la estabilidad y la prosperidad a largo plazo y proteger los derechos de las personas a la vida, la salud y el desarrollo. El terrorismo y el extremismo deben abordarse para no arruinar los considerables logros de desarrollo de Xinjiang desde su liberación pacífica en 1949.
Aprovechando la experiencia de otros países y teniendo en cuenta las condiciones locales, las instituciones de educación y formación en Xinjiang ofrecen a los alumnos cursos que incluyen chino estándar, derecho, habilidades vocacionales y desradicalización. Las medidas abordan tanto los síntomas como las causas fundamentales, respetando y protegiendo completamente los derechos humanos de acuerdo con la ley y la práctica internacional.
Estos programas han arrojado resultados valiosos. No se han producido incidentes terroristas en Xinjiang durante casi tres años desde que comenzó la educación y la capacitación. La población local ha adquirido una fuerte sensación de seguridad y felicidad. La región ha atraído a un número creciente de turistas, con casi 76 millones en la primera mitad del 2019, un 46 por ciento más que el año anterior.
Habiendo adquirido habilidades y mejores habilidades de comunicación, la mayoría de los aprendices se han graduado de los centros. Muchos de ellos han encontrado trabajo y han reanudado las buenas relaciones con sus familiares, amigos y vecinos, gracias a la eliminación de sus ideas extremistas que solían aislarlos y los llevaron a cometer actos ilegales.
De hecho, Xinjiang merece elogios por sus medidas en la lucha contra el terrorismo y el extremismo, sin duda parte de la lucha global contra enemigos tan comunes de la humanidad. Con resultados ya, la educación y capacitación de Xinjiang asegura su propia estabilidad social y es propicio para la seguridad y la estabilidad regional. Los programas han aportado experiencia a las acciones internacionales contra el terrorismo y el extremismo.
Esta realidad ha sido vista de primera mano por periodistas y diplomáticos internacionales de diferentes países que visitaron Xinjiang, que está haciendo lo correcto y no teme publicidad, siempre que los visitantes adopten una postura objetiva e imparcial.
Sin embargo, algunas personas, con prejuicios ideológicos o motivos ocultos, están haciendo todo lo posible para calumniar la reputación de Xinjiang. Deben dejar de lado sus dobles raseros y prejuicios, y dejar de difundir mentiras, rumores y distorsiones en Xinjiang o intentar usar Xinjiang como un peón para contener el desarrollo de China.
De lo contrario, están condenados a la exposición y al fracaso, ya que una causa justa para la humanidad siempre resiste el paso del tiempo.