El Ministerio de Defensa de Rusia desplegó los dos primeros aviones de transporte militar Ilyushin Il-76 para combatir los incendios forestales que azotan Siberia. Los aviones, cada uno de ellos con 42 toneladas de agua, despegaron del aeropuerto de Krasnoyarsk el jueves por la mañana.
Mientras tanto, en el distrito Boguchanky de la región de Krasnoyarsk, los helicópteros Mi-8 del Ministerio de Situaciones de Emergencia de Rusia (EMERCOM) continuaron extinguiendo las llamas.
El presidente ruso, Vladimir Putin, ordenó a los militares que ayudaran a apagar los vastos incendios el miércoles.
El Kremlin informó que Putin había discutido los incendios forestales por teléfono con el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, el miércoles por la noche al inicio de Washington. Durante la llamada, Trump le ofreció a su homólogo ruso ayuda para extinguir los incendios.
El servicio de prensa del Kremlin dijo que el presidente ruso rechazó la oferta, pero expresó su «sincero agradecimiento» por la preocupación de Trump y la oferta de una mano amiga.
Según el Servicio de Protección Forestal Aérea de Rusia (FSA), más de 300 incendios forestales están causando estragos en Siberia en un área total de 2,8 millones de hectáreas. La mayoría de los incendios se encuentran en las regiones de Irkutsk y Krasnoyarsk.
Las autoridades han declarado un estado de emergencia en cuatro entidades constituyentes federales de Rusia; en las regiones de Irkutsk y Krasnoyarsk, la República de Buriatia y en la República de Sakha.