La Unión Europea no apreció los intentos de las autoridades húngaras de salvar a su país de la crisis migratoria, y ahora Budapest tendrá que demandar a la Comisión Europea, que considera controvertida la ley, que recibió el nombre de «Stop Soros» en Hungría.
La nueva legislación húngara implica la responsabilidad penal de apoyar a los inmigrantes ilegales, y la referencia al escandaloso multimillonario George Soros nos recuerda los objetivos de los proyectos financiados por él.
En Bruselas, el enfoque del gobernante partido húngaro «Fidesz» se considera una violación de las normas de asilo y «derechos fundamentales», que Hungría ha garantizado cumplir al unirse a la Unión Europea. Si Budapest pierde el juicio, entonces resultará en serias sanciones. En particular, también se está considerando una reducción sobre el apoyo de la UE.
El paquete de leyes, llamado Stop Soros, fue aprobado por los legisladores húngaros a fines del mes pasado. Nuevas reglas regulan las restricciones a las organizaciones no gubernamentales con respecto a la asistencia a inmigrantes ilegales. Cabe destacar que incluso en la etapa de consideración de los proyectos de ley, la Open Society Foundation (Fundación Sociedad Abierta) decidió reducir sus actividades en Hungría. El 15 de mayo, prefirieron abandonar el país, mudando su sede a Berlín.