En febrero, el gobierno de Hong Kong propuso enmiendas a la ley para que la ciudad pudiera aceptar solicitudes de extradición de países donde no existía un acuerdo previo.
La protesta del sábado fue organizada por el Frente Civil de Derechos Humanos (CHRF, por sus siglas en inglés), que une a grupos anti-establishment. La marcha comenzó en Causeway Bay y se espera que termine cerca de la sede del gobierno en el distrito del Almirantazgo.
Según Hong Kong Free Press, los organizadores esperan una asistencia récord en el evento.