El Gobierno de Nicaragua anunció en un comunicado la aprobación de un programa para la repatriación de quienes dejaron el país tras las protestas antigubernamentales de abril de 2018.

«El Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional informa (…) la aprobación e implementación del programa sobre el retorno voluntario asistido de los nicaragüenses que salieron del país en el contexto de los hechos acaecidos a partir del 18 de Abril del 2018», reza la nota publicada por la web 19Digital.

La propuesta fue presentada el pasado 10 de abril a la opositora Alianza Cívica, que le puso objeciones, pese a lo cual el Gobierno aprobó la iniciativa para garantizar el retorno voluntario de los nicaragüenses en el exterior, asegurando que sean recibidos con «fraternidad, cordialidad y solidaridad».

«Este Programa cuenta con el apoyo y asistencia técnica de la Organización Internacional para las Migraciones, quien solicitará la cooperación de la Comunidad Internacional», agrega el pronunciamiento.

Las conversaciones entre Gobierno y oposición finalizaron oficialmente el 3 de abril pasado, pero ambas partes han mantenido encuentros informales, con el auspicio del Vaticano y la Organización de Estados Americanos (OEA) como testigos internacionales del diálogo para superar la crisis en Nicaragua.

La Nunciatura Apostólica acogió el pasado viernes 12 de abril una reunión entre las partes para avanzar en las conversaciones, que concluyeron sin consenso en puntos medulares de la agenda, como las reformas electorales.

El nuncio Waldemar Sommertag y el enviado especial de la OEA, Luis Ángel Rosadillo, convocaron a los negociadores a una reunión el próximo martes 23 de abril en el Instituto Centroamericano de Administración Económica, para darle continuidad a las pláticas.

Nicaragua vive una crisis política desde mediados de abril de 2018, cuando una reforma al sistema del Seguro Social desató violentas protestas contra la administración del presidente Daniel Ortega, acompañadas por actos que el Gobierno tildó de «terroristas».

Entonces fue convocado un diálogo nacional auspiciado por la Iglesia Católica, que se suspendió dos meses después.

Las negociaciones se retomaron este año y el Gobierno informó el 9 de abril que mantiene reuniones informales con los delegados de la opositora Alianza Cívica, tras culminar oficialmente el diálogo a principios de mes sin alcanzar consenso en varios puntos medulares de su agenda.

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