Una delegación estadounidense presidida por el enviado especial para la reconciliación en Afganistán, Zalmay Khalilzad, arribará a Taskent el 10 de abril», dice el comunicado.
Durante las consultas, las partes planean intercambiar opiniones sobre la situación en Afganistán, particularmente, la posibilidad de lanzar un mecanismo de negociaciones de paz entre los bandos en conflicto, así como evaluar los proyectos socioeconómicos y de infraestructura que Uzbekistán lleva a cabo en territorio afgano.
En marzo de 2018, el presidente uzbeko, Shavkat Mirziyóyev, dijo que que Uzbekistán estaría dispuesto a acoger las negociaciones entre el Gobierno de Kabul y los talibanes.
La oficina de prensa del presidente afgano, Ashraf Ghani, informó a principios de este abril que el Gobierno de Uzbekistán propone organizar estas negociaciones en la ciudad de Samarcanda.
Afganistán vive una situación de inestabilidad a raíz de los ataques que lanzan los talibanes y, desde 2015, el grupo terrorista ISIS (autodenominado Estado Islámico, prohibido en Rusia y otros países), pese a la fuerte presencia militar de EEUU y sus aliados.
Hasta ahora, los talibanes han condicionado el proceso de paz en Afganistán a la retirada de las tropas extranjeras e insistido en acordar el calendario de su repliegue con EEUU, no con el gobierno en Kabul al que califican de «títere».