La reivindicación marítima de Bolivia está más vigente que nunca, afirmó hoy el ministro de Relaciones Exteriores, Diego Pary, en el contexto del Día del Mar, cuando el país recuerda su actual enclaustramiento geográfico forzado.
Dijo Pary que constituye una demanda soberana de salida al Pacífico, en mención a los 400 kilómetros de litoral arrebatados por Chile tras la Guerra del Pacífico, en 1879.
Subrayó el canciller en rueda de prensa que el Gobierno ha reiterado más de una vez la invitación a las autoridades de Santiago para retomar el diálogo sobre el contencioso marítimo.
El fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, emitido en 2018, si bien no representó una obligación para Chile de negociar, estableció el mecanismo de diálogo bilateral entre las dos naciones.
Bolivia nació como república en 1825 con costas al mar, pero le fueron arrebatos 400 kilómetros de litoral y 120 kilómetros cuadrados de territorios ricos en minerales, sostienen las autoridades como uno de los argumentos históricos en la demanda marítima que llevan a cabo ante la CIJ frente a la negativa del Estado chileno a negociar con La Paz.
Este 23 de marzo la nación rendirá homenaje a los héroes que defendieron la soberanía en el puerto de Antofagasta, hace ya 140 años.
El mar es de todo el pueblo boliviano, ha reafirmado el presidente Evo Morales desde el inicio de la demanda de reivindicación de una salida soberana de Bolivia al océano Pacífico.
Tras conocerse el veredicto de La Haya, Morales reseñó que ‘ahora el mundo entero sabe que Bolivia nació con una salida soberana al Pacífico y que nuestra causa es justa e irrenunciable’.
Sobre las actividades de conmemoración de la batalla por la defensa de Calama, el canciller Pary mencionó un homenaje este jueves al combatiente Eduardo Avaroa Hidalgo, considerado uno de los héroes de la batalla de Topáter, en las cercanías de la localidad de Calama, donde murió.
Asimismo se estrenará en la jornada el filme ‘Avaroa, el sol de gloria’, una producción de la cinematografía nacional que rinde tributo al héroe de Topáter, quien fue ascendido de manera póstuma al grado de coronel.