Washington ha acusado repetidamente a Huawei, el mayor proveedor de equipos de telecomunicaciones del mundo, de robar información comercial y espiar en nombre del gobierno chino. La compañía niega con vehemencia las acusaciones y dice que no hay ninguna razón por la que deba restringirse la construcción de infraestructura 5G en ningún país.
Los funcionarios de seguridad de EE. UU. Han expresado su preocupación de que la red de cables submarinos que «transporta a casi todos los datos de Internet del mundo» podría verse comprometida, ya que el gigante chino de telecomunicaciones Huawei se «incrusta» en los sistemas de cable, el Wall Street Journal (WSJ) informes.
Según el periódico, “se abrió un nuevo frente en la batalla entre Estados Unidos y China por el control de las redes globales que ofrecen Internet; éste está debajo del océano ”.
El WSJ recordó que en la actualidad, hay 380 cables submarinos activos que transportan casi el 95 por ciento del tráfico intercontinental de voz y datos, que son de importancia crítica para las economías y los sistemas de seguridad nacional de la mayoría de los países.
El periódico citó a funcionarios de seguridad de Estados Unidos diciendo que el acceso de Huawei Marine Networks Co. a los cables submarinos podría permitir a China cortar enlaces a países enteros o desviar y monitorear el tráfico de datos.
Los funcionarios están especialmente alarmados de que estos cables sean vulnerables al espionaje y que la participación de Huawei en su creación «podría potencialmente fortalecer la influencia de China».
William R. Evanina, el Director del Centro Nacional de Contrainteligencia y Seguridad de EE. UU., Por su parte, dijo que está al tanto de las amenazas a la seguridad de los sistemas de cable submarinos y que garantizar su seguridad sigue siendo una «tarea prioritaria».
La declaración se produjo después de que Estados Unidos, Nueva Zelanda y Australia prohibieran a Huawei desarrollar sus redes 5G, citando amenazas de seguridad. Estados Unidos también ha estado presionando a sus aliados europeos para que sigan su ejemplo e impongan prohibiciones formales a los productos de Huawei cuando se trata de construir la próxima generación de redes móviles inalámbricas; El Reino Unido y Alemania, sin embargo, se han negado a impedir que cualquier empresa haga una oferta.
Huawei ha rechazado repetidamente las acusaciones de Washington de que la compañía ha estado robando información comercial y espiando en nombre del gobierno chino. Huawei dice que no ve ninguna razón racional por la que deba restringirse la construcción de infraestructura 5G en cualquier país.
A principios de diciembre, el alto ejecutivo de Huawei, Meng Wanzhou, fue detenido en Vancouver a solicitud de los Estados Unidos, según informes, por sospechas de que había conspirado para violar las sanciones de Estados Unidos contra Irán. El arresto fue denunciado tanto por Huawei como por Pekín, y las autoridades chinas exigieron que Canadá liberara de inmediato al ciudadano chino.