Un grupo de seguidores del presidente venezolano, Nicolás Maduro, se congregó para expresar su apoyo al Gobierno. Los detractores de Maduro también salieron a protestar y se registraron choques entre ellos y las fuerzas venezolanas. Similares enfrentamientos tuvieron lugar en el estado de Táchira, fronterizo con Colombia.
Todo ocurre un día después de que fueran quemados camiones con la supuesta ayuda humanitaria para los venezolanos. Mientras Estados Unidos y los opositores del país bolivariano, encabezados por el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, responsabilizan a Caracas por ello, el Gobierno de Maduro asegura que se trata de operaciones de falsa bandera.
Maduro, a su vez, volvió a denunciar los intentos de Estados Unidos y sus aliados para usar el tema de las ayudas humanitarias como un “caballo de Troya”.
Desde Cuba, su presidente, Miguel Díaz-Canel, volvió a criticar las injerencias de Estados Unidos en la región señalando que su agresión no solo apunta a Venezuela sino también a América Latina.
Cuba, México, Nicaragua, Bolivia, Rusia, China, Turquía e Irán, entre otros países, han rechazado lo que llaman un “intento golpista” patrocinado por Washington en Venezuela, cuya crisis se agravó el pasado enero, cuando Guaidó se autoproclamó presidente interino del país.