Jordania reiteró hoy su derecho a recuperar tierras arrendadas a Israel, al expirar un contrato firmado en 1994 entre el entonces rey jordano, Hussein, y el primer ministro israelí, Yitzhak Rabin.
El gobierno de Amman dijo que no renovará el acuerdo que permitió a colonos israelíes explotar las áreas jordanas de Baqura y Gumar.
En octubre pasado, el rey Abdala II anunció que terminaría con ese préstamo, aunque el régimen de Tel Aviv intenta mantenerlo.
Los territorios deben volver a manos de los jordanos una vez concluya el contrato, precisaron las autoridades locales.
Como parte de la defensa de su soberanía, el ejército negó entrada el sábado pasado a un centenar de turistas israelíes que pretendían recorrer esos sitios.
La ministra de Estado para las Relaciones con los Medios, Yumana Gunaimat, declaró que Jordania estaba ejerciendo su derecho y que el reino solo negociará con Israel bajo el concepto de defender intereses nacionales.
Tras el anuncio de Abdala II, se establece un plazo oficial de un año para concluir o ratificar el contrato de arrendamiento.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dice que presionará a Amman para que revierta su decisión, pero el canciller jordano, Ayman Safadi, reiteró que su gobierno solo consideraba lo más adecuado para cancelar el contrato.
Los analistas opinan que la medida adoptada por el reino de Jordania refleja la intensa presión de los ciudadanos, cuya mayoría califica a Israel de enemigo.
De igual manera, estiman que, por el hábito y la tendencia de Israel a irrespetar acuerdos y resoluciones internacionales, a Jordania le resultará difícil recuperar sus dos parcelas de tierra.