“Nuestros buques de guerra en la región están proporcionando la protección necesaria. Nunca permitiremos un nuevo acoso”, ha dicho este miércoles Akar en declaraciones a la agencia turca de noticias Anadolu.
El 18 de octubre, un buque turco impidió que una fragata griega interfiriera en la actividad del Barbaros Hayrettin Pasa, un barco dedicado a la prospección petrolífera en el este del mar Mediterráneo.
El Ministerio turco de Exteriores denunció entonces el “acoso” de la fragata griega al petrolero frente a las costas de la República Turca del Norte de Chipre. “Grecia debe abstenerse de actos que puedan causar una escalada en la zona”, reclamó la cartera.
Además, Turquía ha denunciado en reiteradas ocasiones planes de Grecia para extender sus aguas territoriales en el mar Jónico desde las 6 hasta las 12 millas náuticas (22 kilómetros).
A este respecto, Akar ha enfatizado que su país está dispuesto a encontrar a través del diálogo una solución al asunto, “sin convertirlo en un conflicto”. También ha recalcado que Ankara tomará las medidas necesarias para defender sus intereses.
En este mismo contexto, la Cancillería turca convocó el martes al embajador griego en Ankara, Petro Mavroidis, para explicarle que Turquía no puede “tolerar” cambios en las fronteras marítimas griegas mientras no exista consenso entre las partes sobre las modificaciones.
En la convocatoria se advirtió de que, si Grecia lleva sus aguas territoriales más allá de 6 millas náuticas (11 kilómetros), el Parlamento turco otorgará “todos los poderes”, incluidos los militares, para que el Gobierno defienda los intereses de Turquía.