‘Emigrar es un derecho humano’.

“Para nosotros, emigrar es un derecho humano, por tanto se tiene que respetar el derecho de los migrantes. Estamos totalmente opuestos a la política de Donald Trump”, declaró ayer martes Salvador Sánchez Cerén en una visita a la Habana (Cuba).

En su expresión de apoyo a la caravana de emigrantes que desde la semana pasada va hacia EE.UU. y su crítica de la política anti inmigratoria del presidente estadounidense, el dignatario salvadoreño manifestó su solidaridad con la marcha y apuntó que, en su opinión, “México no se va a prestar para las maniobras de Trump”.

Sánchez Cerén señaló además que la emigración desde su país “ayuda a la economía norteamericana”. “Además son productores y, muchos de ellos, empresarios”, añadió.

Por otro lado, el mandatario afirmó que su gestión ha reducido la grave emigración rumbo a EE.UU. con sus “programas de gobierno”, no con la ayuda que brinda el país norteamericano.

Nosotros desarrollamos nuestros programas, hemos disminuido la migración y los homicidios, se ha contado con la cooperación externa… pero ha sido mayoritariamente producto del esfuerzo propio”, dijo en concreto el jefe del Estado salvadoreño.

La caravana partió de Honduras el 13 de octubre con más de 7000 personas, decididas a llegar a Estados Unidos. Actualmente se encuentra en el estado de Chiapas, en el sur de México.

Trump afirmó ayer martes que los emigrantes de la caravana que está recorriendo México “no van a entrar” en su país, y amenazó con “cerrar” militarmente su frontera con México. De hecho, ha desplegado ya en la zona 2200 efectivos de la Guardia Nacional estadounidense.

Días antes, el mandatario había anunciado recortes a la ayuda económica estadounidense a Guatemala, Honduras y El Salvador por no haber frenado la caravana.

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