El presidente de Rusia, Vladimir Putin, dice que las prácticas militares de su país son de naturaleza defensiva y ofensiva, y se ha comprometido a fortalecer las fuerzas armadas de Rusia y proporcionarles las «últimas armas y tecnologías» para ayudarles a proteger mejor al país y sus aliados.
El presidente ruso llegó a la región de Siberia Zabaikalsky el jueves para observar el ejercicio militar masivo, llamado Vostok-2018, el jueves.
El ejercicio, descrito por el Ministerio de Defensa de Rusia como el ejercicio más grande del país desde el final de la Guerra Fría, involucra a más de 300,000 soldados y también incorpora contingentes de China y Mongolia.
El ejercicio comenzó el martes y está programado para funcionar en cinco rangos en el Lejano Oriente de Rusia y en las aguas del Mar de Japón, el Mar de Bering y el Mar de Ojotsk hasta el 17 de septiembre.
Putin elogió el «dominio» del ejército ruso y su «capacidad para enfrentar posibles amenazas» después de ver el simulacro en el campo de entrenamiento militar de Tsugol cerca de las fronteras con Mongolia y China.
«Nuestro deber para con nuestro país es estar preparados para defender nuestra soberanía, nuestra seguridad y nuestros intereses nacionales y, si es necesario, apoyar a nuestros aliados», dijo el presidente ruso tras un gran desfile militar.
«Por lo tanto, continuaremos fortaleciendo nuestras fuerzas armadas, los equiparemos con las últimas armas y tecnologías y desarrollaremos la cooperación militar internacional», agregó.
Putin dijo que el simulacro Vostok-2018 demostró que el ejército ruso era capaz de contrarrestar las amenazas militares.
Rusia ha descrito el ejercicio como de naturaleza puramente defensiva, pero la OTAN ya lo ha condenado como un ensayo de «conflicto a gran escala», diciendo que controlará de cerca el ejercicio, al igual que Estados Unidos, cuyas relaciones con Moscú y Beijing tienen estado deshilachado
La alianza militar occidental de la OTAN ha impulsado su presencia en Europa del Este durante la perforación rusa.
Putin dijo que el gobierno ruso abogó por la paz y declaró que su país era un «estado amante de la paz».
«No tenemos y no podemos tener planes agresivos», dijo el presidente. «Nuestra política exterior tiene como objetivo la cooperación constructiva con todos los países que están interesados en ella».
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, había dicho anteriormente que el ejercicio estaba «justificado» en «la situación internacional actual» dadas las actitudes «agresivas y antipáticas» hacia Rusia.
La OTAN a menudo ha llevado a cabo maniobras militares cerca de las fronteras occidentales de Rusia, estacionado hardware militar avanzado. También ha estado intentando cooptar a más países de cerca de Rusia.