El operativo del buque noruego está equipado con cinco vehículos submarinos autónomos (AUV), una tecnología no utilizada anteriormente en la búsqueda del navío desaparecido. Su operación comenzó este domingo (9.09.2018) y se encuentra a cargo de la empresa estadounidense Ocean Infinity, que por contrato dispondrá de 120 días para la búsqueda y únicamente cobrará 7,5 millones de dólares si el buque «Seabed Constructor» halla la nave, informaron fuentes oficiales.
Promesa de novedades
El ministro de Defensa argentino, Oscar Aguad, aseguró este lunes que «entre hoy y mañana vamos a tener las primeras novedades. Ya están desplegados todos los sumergibles en el Atlántico Sur. Tienen autonomía de 48 horas», explicó Aguad ante los medios en la Casa Rosada, sede del Ejecutivo en Buenos Aires.
En esa línea, el titular de Defensa consideró que las «primeras imágenes, los primeros resultados de lo que va a ser el primer día de búsqueda» estarán disponibles seguramente este martes. Asimismo, informó de que la fragata argentina «Espora» está patrullando la zona para que ningún pesquero «pueda interferir en las operaciones» de búsqueda.
Tres áreas
Las autoridades a cargo de la búsqueda determinaron tres áreas en el Atlántico Sur para revisar el fondo marino con cinco AUV, aunque este lunes sólo tres se encontraban operativos, explicó el portavoz de la Armada argentina, capitán Enrique Balbi, al canal Todo Noticias. Uno de los AUV sufrió un desperfecto técnico y debió ser reparado, en tanto que el quinto todavía no fue lanzado al mar.
Los AUV pueden descender hasta 6.000 metros y están programados para hacer un «relevamiento minucioso del perfil del fondo marino con sonares acústicos y magnetófonos de alta tecnología», explicó Balbi. «En tres días estiman (quienes están a cargo de la búsqueda) que pueden tener un indicio» del operativo, agregó el portavoz.
Los AUV recorrerán tres áreas que fueron determinadas, con diferentes probabilidades de éxito, a partir de la información proporcionada por la Armada argentina y otras fuentes que relevó la empresa Ocean Infinity. Las zonas coinciden con las revisadas en su momento sin éxito por la Armada argentina y de otros cinco países, que participaron de la búsqueda en los primeros meses posteriores a la desaparición del sumergible. Por el momento las condiciones climáticas son «muy buenas» para operar en el Atlántico Sur, indicó la Armada.
La incógnita
El «ARA San Juan» emitió su última comunicación el 15 de noviembre de 2017, después de reportar un incendio en el área de baterías por el ingreso de agua de mar mientras navegaba desde la austral ciudad de Ushuaia rumbo a su base en el puerto de Mar del Plata.
Horas después de esa comunicación se detectó un ruido similar al de una explosión cerca del último punto donde había sido localizado en el océano Atlántico, a poco más de 400 kilómetros de la costa argentina, frente al patagónico Golfo San Jorge. El submarino fue buscado intensamente por una enorme flota internacional de buques y aviones, sin éxito.
Tras suspender la búsqueda durante varios meses, el Gobierno argentino contrató a la firma Ocean Infinity para que encuentre a la nave. Al ser preguntado sobre si se llegará a saber qué le ocurrió al submarino ARA San Juan, ministro de Defensa argentino consideró este lunes que no se podrá probar nada mientras no se consiga algún rastro del submarino: «Los elementos para llegar a un resultado no los tenemos», concluyó.