Acusaciones de acoso y agresión sexual por parte de seis mujeres desveladas este domingo por el semanario estadounidense The New Yorker han forzado la dimisión negociada del ejecutivo neoyorquino Leslie Moonves este mismo lunes, antes de la actividad bursátil de Wall Street.
Las supuestas agresiones habrían tenido lugar a lo largo de un prolongado periodo, entre los años 1980 y el inicio de la década pasada, e incluyen comportamientos de extrema gravedad como relaciones forzadas, intimidación y uso de fuerza bruta contra las presuntas víctimas.
En julio pasado, Moonves se había limitado a admitir que, “hace décadas”, “hizo sentirse incómodas a algunas mujeres con insinuaciones”, pese a que ya se habían planteado acusaciones de claras agresiones y despidos punitivos de empleadas por oponer resistencia a las ansias carnales del ejecutivo.
Los escándalos sexuales en las altas esferas occidentales han sido constantes en los últimos años, desde los innumerables casos de pederastia de la Iglesia católica, el rabinato judío y la clase política europea, hasta el sinfín de episodios de acoso y agresión en Hollywood y el Congreso de Estados Unidos y el propio presidente norteamericano, Donald Trump.