«Nuestra tarea es apoyar aquellos ilustradores que no dejaron de escribir y publicar durante los años de la guerra, con sus libros resaltaron, dieron brillo a esta feria», dijo la vicepresidenta de Siria, Nayah Al Attan.
Por su parte el director general del Centro Cultural Iraní en Siria Albofazl Salehi Nia resaltó que el evento es una prueba que «Siria se ha levantado de nuevo».
Durante el evento que finalizará el próximo 11 de agosto se realizarán distintas actividades culturales, exposiciones artísticas, talleres y seminarios. Además se realizará la publicación de nuevos libros.
La feria cuenta con 6 pabellones grandes, 8 pabellones internacionales pequeños y 4 pabellones nacionales, con cientos de libros divididos por secciones de política, cultura, idiomas, arte entre otros.
Al menos 200 casas editoriales de la región, árabe y otras ciudades de occidente participaron en la feria que se realizó con el financiamiento del presidente sirio Bashar al-Asad en alianza con el Gobierno de Irán.
«Nuestra participación se produce en el marco de la Alianza Integral entre Irán y Siria, porque la alianza no se limita a la participación militar y política, la cultura y el arte son un aspecto primordial de nuestros países», agregó Salehi Nia.
Hasta ahora la Feria Internacional del Libro ha contado con mayor participación en comparación a 2017, debido a la liberación del terrorismo, los ciudadanos están recuperando la cotidianidad de la vida en la ciudad.