«Tenemos que estar unidos porque nos vamos a enfrentar una lucha muy importante» expresó Rousseff. «Lula representa un programa, una idea, todos esos logros que se hicieron para ayudar Brasil, pero por sobre todo Lula representa la esperanza de cambiar el país» dijo la presidenta electa de Brasil y destituida a través del golpe parlamentario, Dilma Rousseff.
A su vez, informó que irá como senadora de Minas Gerais, donde aseguró que continuará la lucha por la libertad de Lula. «Nosotros fuimos responsables de los primeros pasos de un mejor mundo» afirmó ante miles de militantes.
«Tenemos que estar unidos porque nos vamos a enfrentar una lucha muy importante», enfatizó.
A su vez, denunció la vuelta del hambre y la mortalidad infantil con el Gobierno no electo de Michel Temer. «Ellos saben que nosotros nunca dejaremos al pueblo brasileño para que vuelva a pedir dinero en las esquinas y los semáforos» afirmó.