La compra de los sistemas de defensa antiaérea S-400 de Rusia por parte de Turquía es una decisión «soberana» del gobierno en Ankara, sin embargo, Turquía debe tener en cuenta que estas armas no cumplirán con los sistemas de la OTAN, dijo a periodistas el secretario de Estado estadounidense. James Mattis el lunes.
En septiembre, el servicio de prensa del Servicio Federal de Rusia para la Cooperación Militar-Técnica (FSMTC) dijo que Moscú y Ankara habían llegado a un acuerdo sobre la entrega de los sistemas S-400 a Turquía. Erdogan dijo que Turquía ya había hecho un depósito para los sistemas S-400. El 29 de septiembre, el asistente presidencial ruso Vladimir Kozhin confirmó que Turquía había hecho un pago inicial por los S-400, y agregó que la entrega está programada para 2019.
A fines de octubre, el presidente del Comité Militar de la OTAN, general Petr Pavel, advirtió a Turquía que podría haber consecuencias si el país adquiría el sistema de defensa antiaérea S-400 de Rusia y agregó que evitará que Turquía se convierta en parte de un sistema integrado de defensa aérea.
El lunes, el secretario de Defensa de los EE.UU., James Mattis también advirtió a Turquía sobre los peligros de la decisión.
«Esa es una decisión soberana para Turquía. Claramente, no será interoperable con la OTAN. Así que tendrán que considerar eso si continúan», dijo Mattis.
El S-400 Triumph es el sistema móvil de misiles tierra-aire de próxima generación de Rusia que transporta tres tipos diferentes de misiles capaces de destruir objetivos aéreos en un rango de corto a extremadamente largo. Integra radar multifuncional, detección autónoma y sistemas de objetivos, sistemas de misiles antiaéreos, lanzadores y un centro de mando y control.