En Siria, uno de los aliados de los Estados Unidos desertó hacia los insurgentes. La agrupación de la oposición moderada, que era parte de la coalición internacional, entregó los complejos antitanque y otras armas a la organización terrorista de Jabhat al-Nusra.
Los terroristas ya lo habían utilizado contra el Ejército Sirio en la provincia de Hama, tras haber alcanzado varios tanques. Sin embargo, el Pentágono prefiere no hablar sobre tal falla en Medio Oriente. En lugar de esto, el comandante estadounidense James Gerard anunció que miles de residentes de Deir ez Zor habrían huido del ejército gubernamental sirio hacia Mayadin.
El Ministerio de Defensa de Rusia ya ha llamado a esta declaración un absurdo geográfico. Igor Konashenkov, el representante oficial del ente, recordó que, en primer lugar, Mayadin se encuentra en el sudeste de Deir ez Zor, y en segundo lugar, ambas ciudades están liberadas de los insurgentes por el mismo ejército sirio, con el apoyo de la fuerza aérea rusa.
Y los sirios simplemente regresan a sus hogares, donde les espera la ayuda humanitaria del centro de reconciliación y de las organizaciones internacionales.