La divulgación del proyecto republicano de reforma fiscal, prevista inicialmente para hoy, se retrasará hasta mañana ante la falta de consenso sobre algunos puntos claves de la iniciativa que promueve el presidente estadounidense, Donald Trump.
El titular del Comité de Medios y Arbitrios de la Cámara de Representantes, el republicano Kevin Brady, confirmó anoche que su partido esperará hasta el jueves para presentar esa iniciativa tras una consulta con el jefe de la Casa Blanca y el liderazgo de la formación roja.
Según el diario The New York Times, los republicanos lucharon con la desalentadora aritmética de reducir drásticamente las tasas impositivas, como prometió el gobernante, sin alienar a electores clave mediante la eliminación de exenciones tributarias populares.
Después de un día de negociaciones en el Capitolio y confusión en Washington, Brady reconoció la demora, pero aseguró que siguen en el camino correcto con un ambicioso plan para conseguir que el proyecto de ley sea aprobado en la Cámara baja antes del receso que comenzará el 17 de noviembre.
Pero, incluso si la demora no desvía el cronograma, muestra posibles dificultades para los republicanos con respecto a la propuesta que están tratando de aprobar de forma unilateral, pese a la fuerte objeción de algunos grupos empresariales y la constante crítica de los demócratas.
‘Cuando una de las partes intenta apresurar una ley de esta envergadura redactada en secreto, sin una sola audiencia pública, se pueden esperar resultados como este’, expresó el representante Richard Neal, el principal demócrata en el Comité de Medios y Arbitrios.
‘Los republicanos deberían reducir la velocidad, trabajar a través del orden legislativo regular y hacer esto bien, no rápido’, consideró.
Sin embargo, es poco probable que la formación roja vaya a frenar el paso, sobre todo luego de que el presidente expresara ayer su deseo de tener la propuesta lista para firmar antes de fin de año, preferentemente para Navidad (25 de diciembre).
Conseguir el aval de su prometida reforma fiscal le daría a Trump una gran victoria legislativa en su primer año de mandato, pues hasta el momento solo puede contar como éxito importante en el Capitolio la confirmación de Neil Gorsuch como juez de la Corte Suprema.
Aunque el jefe de la Casa Blanca ha llevado a cabo muchas promesas de campaña mediante órdenes ejecutivas y memorandos presidenciales, los compromisos relacionados con el trabajo del Congreso como la derogación del Obamacare o la obtención de fondos para un muro fronterizo con México no se han concretado.