Para el Ejército Árabe Sirio, el año 2017 ha sido posiblemente el mejor año de la guerra para ellos y sus aliados, ya que han liberado una gran porción de territorio de las fuerzas rebeldes y del Estado Islámico.
Primera mitad del año
Comenzando con el este de Alepo, el Ejército Árabe Sirio pudo imponer el control total sobre el campo oriental de la provincia, expulsando al Estado Islámico hacia el campo sur-occidental de la gobernación de Raqqa.
Una vez asegurado el este de Aleppo, el ejército sirio continuó sus operaciones en el centro de Siria, liberando a Palmira, Rusafa y finalmente a Sukhnah después de una operación masiva en coordinación con sus aliados de Hezbolá y Rusia.
Mientras tanto, en la frontera libanesa, el ejército sirio y Hezbollah finalmente sellaron la frontera sirio-libanesa después de más de seis años de guerra.
Segunda mitad del año
Una vez que se selló la frontera libanesa, el ejército sirio cambió su atención a Deir ez Zor, centro de Siria y la frontera jordana.
Desde el lanzamiento de su ofensiva fronteriza jordana, el ejército sirio ha capturado más de 8,000 kilómetros cuadrados de territorio en las gobernaciones de Damasco y Al-Sweida.
En el frente del centro de Siria, el ejército sirio ha despejado completamente el campo oriental de la gobernación de Hama y casi todo el distrito de Jubb Al-Jarrah de Homs, dejando solo un pequeño bolsillo del Estado islámico en el este de Homs.
Tal vez el avance más importante realizado es en la Gobernación de Deir ez Zor, ya que sus fuerzas levantaron el sitio de la capital provincial y liberaron el bastión del Estado Islámico de Al-Mayadeen.
Los mapas de abajo ilustran los 57,000 kilómetros cuadrados de territorio que el ejército sirio ha recuperado este año; todavía les quedan más de 37,000 km por recorrer antes de despejar el último bolsillo del «E.I.» en Siria.
