El 20 de octubre, el ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, pidió que se retirasen las armas nucleares estadounidenses de Europa en una conferencia sobre la no proliferación de armas nucleares, en Moscú.

«Apostamos por que las armas nucleares norteamericanas se retiren de Europa y regresen a Estados Unidos».

El ministro solicitó también a la OTAN que pusiese fin a los ejercicios con armas nucleares que lleva a cabo en los territorios de sus miembros sin este tipo de arsenal.