Las regiones italianas de Lombardía y Véneto realizarán hoy un referendo consultivo no vinculante en el cual los ciudadanos podrán solicitar a los respectivos gobiernos el inicio de las gestiones para obtener un cierto grado de autonomía.
Aunque en ambos casos las consultas fueron promovidas por gobernadores pertenecientes a la xenófoba Liga Norte (LN), las consultas cuentan con el respaldo de varias fuentes políticas, aunque también con la oposición de otras que llamaron al voto en contra o a la abstención.
A favor del Sí en Véneto están las agrupaciones pertenecientes a la alianza que respalda al gobernador Luca Zaia, integrada por la LN, y las también derechistas Fuerza Italia y Hermanos de Italia, junto a importantes organizaciones empresariales y parte de los sindicatos.
Por su parte, el Partido Democrático (PD) y el Movimiento 5 Estrellas (M5E) apuestan por lo que algunos medios califican de apoyo crítico.
El PD líder de la mayoría de gobierno a nivel nacional, pero principal partido de oposición en el regional, dejó a sus miembros en libertad hacer lo que mejor les parezca, aunque siempre criticando la consulta por el gasto que representará para los contribuyentes.
En la Lombardía, el partido gobernante no impartió indicaciones claras sobre cómo proceder ni apoya el referendo, pero en cambio sí lo hacen un buen número de sus alcaldes, entre ellos el de esta ciudad, Giuseppe Sala y el de la vecina Bérgamo, Giorgio Gori.
EL M5E, por el contrario, opina que el dinero invertido en solicitar el criterio del pueblo sobre algún aspecto de interés nunca será mal gastado.
En ambos casos están en contra Artículo 1-Movimiento Democrático y Progresista, junto a otras colectividades menores de izquierda, para quienes el referendo en ambos casos es innecesario porque sus objetivos pueden cumplirse mediante una gestión administrativa interna como hizo recientemente la región de Emilia Romaña.
Esas organizaciones llamaron a la abstención, porque consideran que ambas consultas son meras operaciones de propaganda con propósitos políticos a favor de las aspiraciones electorales de sus promotores.
A diferencia del recién efectuado referendo en Cataluña, este no procura la independencia y se celebra con la anuencia de las autoridades, en el marco de lo establecido por la legislación vigente.
En Lombardía, donde no importa el quórum, se le pedirá a los electores opinión sobre si desean que la región, considerando sus características y en el contexto de la unidad nacional, emprenda las iniciativas institucionales necesarias para pedir al Estado las atribuciones para ulteriores formas y condiciones particulares de autonomía.
La pregunta en Véneto, por su parte, se limitará a saber si los votantes desean que a la autoridad regional se le concedan ulteriores formas y condiciones particulares de autonomía, aunque allí si será necesario contar con la participación del 50,1 por ciento de los electores registrados para que los resultados sean válidos.
Los colegios electorales permanecerán abiertos desde las 07:00 hasta las 23:00 hora local y a ellos podrán acudir todos los inscriptos en las listas electorales de las dos regiones que residan en el territorio nacional.
En Véneto se votará con boletas de papel, en tanto en la Lombardía se hará electrónicamente.