China entrega $22 millones en armas y municiones a Filipinas, el segundo lote que envía Pekín desde que EE.UU. canceló un envío de rifles de asalto a Filipinas.
Las armas donadas incluyen 3000 rifles M4, 3 millones de municiones y 30 francotiradores, algunas de las cuales serán utilizadas para combatir el terrorismo, según comunicó el jueves la cadena de televisión filipina GMA.
Los rifles, valorados en 3,3 millones de dólares, serán entregados a la Policía Nacional de Filipinas, que necesita reabastecerse después de que algunos legisladores estadounidenses bloquearan la venta de unos 26.000 rifles M4 el año pasado por preocupaciones sobre abusos de efectivos policiales en la guerra contra las drogas.
De acuerdo con el secretario de Defensa de Filipinas, Delfin Lorenzana, las armas chinas estaban inicialmente destinadas a los militares filipinos, sin embargo, el presidente filipino, Rodrigo Duterte, consideró que la necesidad de la Policía era mayor.
“Tenemos suerte de que el Gobierno chino haya proporcionado las armas de fuego”, indicó Lorenzana.
El embajador de China en Filipinas, Zhao Jianhua, dijo que Pekín había entregado a Filipinas alrededor de 5500 millones de pesos (300 millones de dólares) en ayuda militar y de socorro en un poco más de un año.
El diplomático chino aseguró que Pekín continuará proporcionando asistencia y subvenciones a Filipinas.
“China es un sincero amigo y sincero socio (de Filipinas), y lo seguirá siendo para siempre”, apostilló.
El portavoz de las Fuerzas Armadas filipinas, el coronel Edgard Arevalo, aseveró que los suministros chinos ayudarían en varias operaciones antiterroristas, incluyendo en la ciudad meridional de Marawi, que los extremistas del EIIL (Daesh, en árabe) tomaron bajo su control hace cuatro meses.
La primera ronda de suministros de armas de China fue entregada en junio e incluyó más de 3000 rifles de asalto y de francotirador y casi 6 millones de municiones. Los militares se quedaron con los rifles de francotirador, pero pasaron las otras armas a la Policía.
A pesar de las disputas territoriales de larga data sobre el mar de China Meridional, China y Filipinas se han acercado bajo la Administración de Duterte.